Las primeras pruebas operativas para el funcionamiento del trambús porteño comenzaron a ser realizadas esta semana, sobre el recorrido que hoy realiza la línea de colectivos 34, en el Metrobús de la avenida Juan B. Justo.
El horizonte en cuanto a tiempos resulta promisorio: el nuevo sistema de transporte promete reducir hasta un 40% la demora en los traslados en ese trayecto.

Las primeras unidades del trambús -100% eléctricos- empezaron a rodar el miércoles. Las pruebas operativas incluyen la capacitación de conductores, el chequeo técnico de los vehículos y la realización de recorridos de prueba previos a su puesta en marcha definitiva.
Lo que sigue
Mientras tanto, avanza la construcción de la línea T1, que unirá Aeroparque con Nueva Pompeya. En esta etapa inicial, los trambuses utilizan el corredor del Metrobus Juan B. Justo —donde la infraestructura ya está disponible— y luego continúan por las avenidas Bullrich, Dorrego, Figueroa Alcorta, Sarmiento y Costanera Rafael Obligado.
Un servicio cada cuatro minutos
Son más de 3,6 millones de personas las que se desplazan a diario por la ciudad de Buenos Aires. De ese total, casi la mitad lo hace en transporte público.
El trambús se perfila como un refuerzo estratégico, aseguran desde la gestión porteña.
Según las proyecciones oficiales, la T1 beneficiará a unos 50.000 usuarios por día, con un servicio cada cuatro minutos en hora pico y 50 unidades en operación.
La línea será transversal: partirá del Centro de Trasbordo Sáenz, en Nueva Pompeya, y llegará al Aeroparque metropolitano. Así, recorrerá ocho barrios y enlazará a cinco líneas de subterráneos (A, B, D, E y H) y cinco estaciones de los ferrocarriles Mitre, Belgrano, San Martín y Sarmiento. También tendrá una parada cada 500 metros y contará con 71 paradores.

Un salto tecnológico
Las unidades del Trambús son eléctricas, accesibles y equipadas con un paquete tecnológico orientado a mejorar seguridad, confort y sustentabilidad. Incluyen piso bajo, suspensión neumática, rampas, aire acondicionado, WiFi, conectores USB y sistemas de monitoreo.
También cuentan con validadores para el sistema multipago con tarjeta de débito, de crédito o NFT, y tendrán tarifa integrada con el Subte para descuentos automáticos en las combinaciones.
La previsión
La flota de metrobuses estará compuesta por más de 50 vehículos con autonomía mínima de 270 kilómetros. Sus chasis fueron desarrollados en el país, mientras que la motorización eléctrica y los sistemas de software y baterías fueron integrados en el Reino Unido.
De acuerdo con lo previsto, además habrá unidades articuladas de 18 metros para 120 pasajeros.
Prioridad de paso
El funcionamiento del Trambús incluirá carriles exclusivos o preferenciales y semáforos sincronizados por telemetría para darle prioridad de paso.
Además, habrá una serie de estaciones que contarán con espacios de guardado para bicicletas y lockers, con la intención de reforzar la idea de una movilidad integrada.
“El Gobierno porteño busca potenciar la intermodalidad del transporte en la Ciudad”, afirmó el ministro Pablo Bereciartua, ministro de Infraestructura y Movilidad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
