En un caso de defraudación millonaria un vecino jubilado de San Isidro firmó bajo engaño una carta poder para que una mujer cobrara sus haberes previsionales cuando estaba internado con un cuadro grave de salud.
De acuerdo con la denuncia, la mujer lo hizo firmar, bajo engaño, una carta poder cuando se encontraba en un sanatorio de la ciudad de Buenos Aires. Con ese documento en mano, se presentó en la UDAI San Isidro de ANSES . Logró que el organismo la reconociera como apoderada para tramitar y cobrar la jubilación.
Poco después, con una certificación del organismo previsional, consiguió que el Banco Ciudad también la habilitara como apoderada bancaria y le emitiera una tarjeta de débito. Esa maniobra le permitió quedarse con el dinero, incluso después del fallecimiento de la víctima de la estafa, en mayo de 2024.
Entre mayo y agosto de ese año, la acusada extrajo de la cuenta del jubilado más de 13 millones de pesos: parte del dinero lo retiró de cajeros automáticos, y otra la gastó con tarjeta de débito en compras personales, entre ellas dos operaciones en un local de colchonería sobre avenida del Libertador, por 2,4 millones y 1,5 millones de pesos respectivamente
Según la acusación, la mujer actuó “bajo engaño” aprovechándose de la internación y del delicado estado de salud y avanzada edad del jubilado.
A juicio
La maniobra fue advertida por el único heredero del anciano, vecino de la localidad bonaerense de Martínez, quien presentó una denuncia penal ante la justicia de San Martín.
La mujer está procesada por defraudación por circunvención de incapaces y defraudación contra la administración pública, delitos que prevén penas de prisión.
La jueza del Tribunal Oral Federal 3 de San Martín, Nada Flores Vega, acaba de resolver que el juicio se realice en este distrito, pese a que la firma bajo engaño se concretó en un sanatorio de la ciudad de Buenos Aires. Tomó esa decisión porque el trámite ante Anses, el banco y las compras con dinero ajeno se hicieron en la zona norte del conurbano bonaerense
También porque el principal testigo, denunciante y heredero universal de la víctima vive en Martínez.
Todo ello ” favorece una pronta terminación del proceso, a la luz de una buena administración de justicia”, concluyó la magistrada.
